RENACIMIENTO EN ESPAÑA – 14 – EL GRECO - guadahumi3
04 DE DICIEMBRE DE 2018
11 DE DICIEMBRE DE 2018
EL CRECO
Doménikos Theotokópoulos, cretense de
nacimiento y español de acogida, y le lamaban griego porque era griego, cuando
murió Navarrete el Mudo que era el pintor que estaba en ese momento en la
esfera de Felipe II. Muchos pintores iban a la esfera de El Escorial para ver
si Felipe II les daba una oportunidad para poder pintar, y uno de ellos fue Doménikos
Theotokópoulos que se presentó con una pintura.
EL MARTIRIO DE SAN MAURICIO (1580-1582) – EL
GRECO
Con
esta pintura de San Mauricio fue con la que el Greco se presentó a Felipe II y
que en principio era inocente, una pintura romana, una pintura sin ningún tipo
de problema, pero a Felipe II no le gustó nada.
Felipe
II dijo que no podía ser eran esos colores tan brillantes, Caóticos, tan
extraños porque una de las características que predominan en la pintura del
Greco eran esos colores tan metálicos y que muchas veces eran irreales, colores
que mostraban ese concepto veneciano,
porque El Greco estuvo en Venecia viendo y observando a Tiziano, Veronés,
Tintoreto, etc..
Después
dijo Felipe II que las imágenes y las figuras eran tan extrañas que parecían
que flotaban, muy estéticas, excesivamente desproporcionadas, muy musculadas al
estilo de Miguel Ángel y además el cuadro se llama el Martirio de San Mauricio,
y se encuentra en segundo plano dijo Felipe II y eso no podía ser, pues debe
estar el primero, siendo un concepto histórico narrativo y las escenas están al
revés o simplemente haber sido la escena del martirio.
El
cuerpo de san Mauricio no le gustó nada a Felipe II pues era un contraposto
extraño con mucho dramatismo en la cabeza, desnudo con esos músculos, t con
desnudos en el fondo que recuerdan al tondo de la Sagrada Familia de M.A. donde
ponía desnudos detrás sin ningún tipo de sentido y además con esos Rompimientos
de Gloria tan característicos del Greco para dividir el cielo de la tierra.
Se
observa un concepto violento y demasiado moderno, es decir la pintura para
Felipe II no formaba parte de ningún mensaje contrarreformista, y por lo tanto
la rechazó pero no la descartó se la quedó y no le contrató no llegando a
formar parte dela élite de los pintores.
El
Greco al ser rechazado se fue a Toledo y allí creó una escuela muy importante
la Escuela Toledana en la que estuvieron artistas tan importantes como Juan
Bautista Maino en el s-XVII o Luis Tristán del s-XVII del barroco y que formó
parte de esa escuela inspirada por el Greco.
DATOS
INTERESANTES
El
Greco nació en Creta y casi todo el mundo conoce la pintura del Greco español,
pero el Greco no empezó siendo el Greco, sino que empezó siendo un pintor con
un claro componente bizantino, pues la época lo requería y sobre todo la zona
en la que vivía más.
INMACULADA
CONCEPCIÓN - EL GRECO
Usaba
colores dorados, irreales, colores que recordaban al mundo del treccento y de
esas pinturas en donde lo dorado dominaba absolutamente todo, porque no se
quería marcar ni la cronología ni la temporalidad y por lo tanto, el dorado
daba toda esa sensación.
San
Lucas pintando a la Virgen, el Greco (1565/67)
– Museo Benaki (Atenas)
Una
de las primeras pinturas de Doménikos Theotokópoulos, que sorprende al no tener
nada que ver con sus pinturas posteriores, pero es que el Greco, fue una
persona que se adaptaba a la sociedad en la que vivía.
LA
CURACIÓN DEL CIEGO (1567/70) – EL GRECO
Cuando
pintó la curación del Ciego estaba en
Italia, por lo que la pintura es a imagen y semejanza de Tiziano, Tintoreto,
con las pinturas con concepto escultórico, con noción de numerosos grupos de
personajes dialogando entre sí que interactúan entre ellos, con una gran
profundidad y simetría al modo de los artistas venecianos con esa explosión de
colores pastel, y este era Doménikos Theotokópoulos cuando llegó a Italia.
Esto
dice que era un artista polifacético que se adaptaba a las circunstancias en
las que vivía, pero al llegar a España hizo un cambio que no tenía
absolutamente nada que ver con lo que hizo en Italia y que seguiría
desarrollando ese tipo de pintura en España básicamente gracias al Cabildo de
la Catedral de Toledo, es decir, a toda la élite religiosa de Toledo que
aceptaban sus pinturas, como Felipe II no le aceptaba le dio igual porque le
aceptaba la élite religiosa de Toledo y podía vivir tan solo con las pinturas
que podía hacer en esa ciudad.
11
DE DICIEMBRE 2018
ALGUNOS
DATOS INTERESANTES
LA
TRINIDAD 1577 – EL GRECO – Museo del Prado
Como
esta pintura de la Trinidad les gustó
tanto a la élite toledana, y siendo una de las primeras pinturas que realizó
cuando llegó a Toledo al causar tanto éxito entre la éxito religiosa decidió
quedarse y como era su forma de pintar decidió que así iba a pintar.
Doménikos
Theotokópoulos apareció como una persona novedosa en la época, tan novedosa que
se quedó en la época, no hubo más allá, fue como un Caravaggio al no haber
nadie parecido al greco después, al ser tan extraño y novedoso que nadie se
atrevió a hacer después una pintura que pudiera ser parecida al Greco, por lo
que se quedó denostado durante muchos años y querido a partir del s-XX con las
tendencias ismos y demás, viendo en el Greco uno de los primeros pintores
revolucionarios de la pintura y que lo estudiarían pintores como Manet, Monet, etc.
que valoraban ese modo de pintar en el que siempre estaba relacionado un
posible defecto visual.
La
Trinidad fue el primer encargo en España en 1577 de D. Luis de Castilla (hijo
del Deán de la Catedral de Toledo), siendo una de las primeras obras que
tendría en Toledo el greco en donde ya se quedaría para el resto de su vida,
donde murió y donde desarrollo la mayor parte de su producción.
En
Toledo sería donde su pintura evolucionaría haciendo esas formas estilizadas,
muy largas, fantasmagóricas con colores muy fríos y con grandes contrastes, con
las cabezas muy pequeñas respecto al cuerpo dando esa sensación de figura que
flota.
Se
ha hablado mucho del problema del estrabismo del Greco y que era el motivo por
el cual deformaba las figuras, pero que no era el todo cierto porque se sabe
que Leonardo da Vinci también tenía ese problema y no deformaba las figuras, lo
que sí es verdad es que el Greco daba una perspectiva a sus pinturas que no las
daba otro pintor y que durante su época era una persona que tuvo muchísimo
éxito en la élite religiosa de la zona de Toledo, no así en el concepto real,
en la corte, en el núcleo duro de Felipe II que rechazó una de sus obras y no
le nombró pintor del rey, porque no le gustaba el concepto de obra que dejaba
en un segundo plano el martirio, cuando el martirio era la seña de identidad de
la contrarreforma porque los santos son y una de sus señas.
El
Greco fue una persona que hasta el s-XX no fue redescubierto, ni estudiado al
cien por cien, porque muchísimos años fue denostado, fue un pintor marginado
pero en el s-XVII fue un pintor con mucho éxito en Toledo y posteriormente fue
decayendo su fama hasta tal punto de ser denostado, así como Velázquez y
pintores que a día de hoy son muy importantes.
El
Greco estuvo muchos años desparecido, resucitando las figuras Monet, Manet,
Renoir, los impresionistas, los cubistas como Picasso que vieron en las formas
marginales una forma de hacer nuevas figuras como el cubismo, y todos los ismos
que son maneras de pintar y en el fovismo de Matisse influyó en esas personas
que mostraban el color o el protagonista de sus obras en París, ya que el color
era parte fundamental al ser colores muy fríos y además son imágenes que
casaban muy bien con la contrarreforma, al ser imágenes muy enigmáticas,
misteriosas, en el caso del Greco fue un poco distinto, pero pintores como
Zurbarán que era mucho más sencillo que el Greco que pintaba básicamente para
las élites y las iglesias.
Se
sabe que era una Trinidad, pero no todo el mundo del s-XVI – XVII conocía al
cien por cien lo que era la Santísima Trinidad, pero todo el concepto que
englobaba y su simbología no lo entendían, la gente solo veía las imágenes
iconográficas y que debían respetarla porque el Concilio de Trento así lo había
dicho y no sabían nada más pero al ver esa imagen sabían que era importante y
que se respetara, era lo único que se le pedía a las clases populares de la
contrarreforma.
La
forma de las figuras es una forma de corazón sobre la Trinidad sujetada por la
corte celestial de ángeles que rodean la imagen y que además aún tenía esos
ecos de bizantinismo que el Greco empezó cuando era un aprendiz en su Creta
natal, el concepto dorado que tan perdido estaba ya en siglos anteriores, que
los recuperaría hasta tal punto que muchos historiadores del arte dicen que el
Greco es el que hace renacer otra vez el concepto del dorado y de esa pintura
atemporal que se mostraría en la poca perspectiva, en el color dorado, en esas
figuras alargadas.
Básicamente
lo que consigue el Greco en esa Santísima Trinidad es que el observador se fije
en la figura de Jesús, una figura que recuerda la forma de Miguel Ángel con las
piedades manieristas, cuando el Greco llegó a Roma Buonarroti ya había muerto,
pero conoció sus pinturas, conoció muy bien las pinturas de Rafael, se dejó
influir por las formas manieristas de Miguel Ángel y el color de Rafael Tiziano.
TRES
RETABLOS SANTO DOMINGO EL ANTIGUO, EL
GRECO DE TOLEDO
- Retablo
Principal
- Vista
desde abajo
- Conocimiento
de Italia
- Color
veneciano
- Solemnidad
Se
puede observar claramente ese concepto, al Greco no le importaba absolutamente
nada lo que pudiera pensar al ver sus pinturas, se parecía a Caravaggio que
pintara para que sus obras fueran vistas y quien le gustaba compraba y a quien
no le gustaba pues no compraba.
El
Greco se dio cuenta que el Cabildo de Toledo, la élite religiosa se las
compraba y por eso hay tantas obras del Greco en Toledo así como de su taller,
pues tuvo un gran taller y muchísimos artistas fueron educados por este maestro
y siguieron sus formas, lo que pasa es que las pinturas de los alumnos del
Greco se distinguen bien, esas obras tienen figuras alargadas, misteriosas y
fantasmagóricas pero a su vez se nota que no son del Greco.
Esta
obra que se hizo par Santo Domingo el Antiguo de Toledo formaba parte de un
retablo, básicamente el Greco trabajaba para los Retablos por ser el escaparate
perfecto para sus obras, teniendo en cuenta que las pinturas como se conciben
hoy día nos eran así en el s-XVI, XVII, pues una pintura podía formar parte de
una colección privada y en ese caso si se hacía para la colección al ser un
encargo normalmente de un noble, rey, princesa, etc., pero pasaba a formar
parte de una colección, por lo tanto, que una obra esté en el Prado desvirtúa
el concepto original de la obra, sin embargo otras pinturas estaban hechas y
destinadas para los Retablos.
Cuando
se van a restaurar para restaurar y sobre sobre en la Desamortización muchas de
esas pinturas se quitaron de los retablos, y actualmente se encuentran en
distintos museos como el del Prado, por lo que el concepto global de la obra se
pierde, porque junto con esa ora hay otras muchas que se perdieron muchas de
ellas y que eran las que ayudaban a comprender cual era el concepto global de
esa imagen.
Hoy
día se puede ver que es una Trinidad, pero no se saber cual era el concepto
global que encuadraba todo ese Retablo, no se sabe porque muchas de esas obras
se perdieron y ese es el problema del s-XVI y s-XVII y que no ocurre tanto en
la Edad Contemporánea ya que no juega tanto con el Retablo.
La
vista está siempre hecha desde abajo y va a sorprender mucho las imágenes que
son gigantescas en muchos casos, pero alargadas y por lo tanto dan la sensación
de que van a ser absorbidas por el cielo en muchas ocasiones y ese es el
concepto raro que dio el Greco.
Durero
fue una persona muy importante en España y Felipe II tuvo muchas de sus
pinturas, así como del Bosco.
Felipe
II era una persona un poco misteriosa al que llamaban el rey Prudente, fue un
gran gobernante y llegó a la monarquía hispánica en el momento de mayor gloria
y al comienzo de esa crisis con bancarrotas, pero si por algo se distingue
Felipe II era por su afán coleccionista y no se sabe si porque gracias a la
pintura marcar su poder como los reyes europeos que presumían de ser
coleccionistas de arte y de tener obras de arte y por lo tanto tener todo el
poder, o bien por afición personal, pues se podían tener por ambas cosas,
aunque lo normal era mostrarse al resto como un gran rey, o un gran noble que
era al fin y al cabo lo que englobaba esa sociedad de bienquedismo, una
sociedad en la que tenían que mostrar su riqueza, y su potencia.
Felipe
II destacaba también por tener pinturas de artistas que no eran muy
contrarreformistas, siendo uno de los
grandes casos el Bosco, y también tenía pinturas de los flamencos del norte de
Europa como Durero, Arcimboldo pintor italiano que hacia retratos a través de
verduras y frutas, eras artistas raros, pero Felipe II mostraba predilección
por esos artistas, y sin embargo no le gustaba el Greco.
En
el caso de Durero fue importante en el arte español, porque gracias a sus
estampas y a sus grabados muchos artistas copiaron distintas iconografías, como
en el caso de la Trinidad del Greco o del Cristo de los cuatro clavos de
Francisco Pacheco.
Las
estampas eran importantes porque eran fácil de transportar y no había problema
en los intercambios, pues los lienzos eran mucho más difíciles y muchos de
ellos se perdieron en naufragios.
- Miguel
Ángel
- Color
veneciano
- Gran
solemnidad
- Sensación
de rapidez
- Anulación
espacial
- Posiciones
forzadas
- Importancia
del color
EL
EXPOLIO - EL GRECO
Esta
obra que se encuentra en la Sacristía de la Catedral de Toledo que fue el lugar
para donde se hizo, estuvo en algún momento en el Museo del Prado.
El
Museo del Prado es una gran institución que protege muchas obras de arte. El
Museo está dividido en dos grandes salas, la primera sería el museo real donde
están todas aquellas obras que pertenecen a las colecciones reales desde los
RRCC hasta Fernando VII, etc. y por otra parte está el Museo de la Trinidad que
se funden. El Museo del Prado tiene un sótano que es un gran almacén de
pinturas y de vez en cuando las sacan restauran y poniéndolas en la colección
permanente.
Todas
las pinturas que pertenecen a una temática religiosa son pinturas que
generalmente proceden de las desamortizaciones, o bien de Mendizabal y Madoz
que fueron destinadas al Museo de la Trinidad que es un organismo para proteger
todas aquellas pinturas que fueron en un momento desamortizadas.
En
un momento dado se reclamaron todas esas pinturas por las instituciones
religiosas, iglesias, catedrales, etc.
ya que fueron saqueadas y entonces volvió el lienzo a la Catedral de
Toledo.
El
protagonista de esa obra sería Jesús donde se marcó algo totalmente diferente
en la iconografía con ese color rojo que impactó directamente en el espectador
y hace que la vista se fije directamente en el centro, pero no era convencional
esa figura, es una figura alargada y que parece que flota.
En
la obra se ven las tres Marías a la izquierda, el verdugo a la derecha y esa
leve influencia del concepto de Miguel Ángel manierista, fantasmagórico, pero
el color es del Greco, vivos, metálicos.
Se
observa que el verdugo está en un contraposto que domina el espacio del espectador
la perspectiva y parece que va a salir del lienzo para que entre el espectador
directamente en ese Expolio en el que muestra a Jesús como humano que es lo que
al fin y al cabo pretendía, que era mostrar a Jesús humano, un hombre que
sufría, y que iba a morir por la humanidad, ya no era el Cristo sin dolor que
se mostraba en el mundo románico o gótico, y al ser un Cristo humano la
iconografía que se hacía era un hombre que sentía dolor y aún así estaba
totalmente decidido a morir por la humanidad, siendo un contraste entre la
noción humana y una resignación de lo que iba a ocurrir y era así porque tenía
que ser así.
Cuando
el Greco llegó a España su obra no era muy dado a poner perspectiva,
profundidad, ni hacer grandes paisajes, sin embargo eso lo había hecho en
Italia, pero cuando llego a España cambió totalmente y sus pintoras mostraban
un gran manierismo muy italiano porque haría pinturas inestables, alargadas,
que estaban todas en un lienzo de una manera que daría esa sensación de “horro
vacui” (miedo al vacío) como podía ocurrir con la Virgen del Cuello Largo de Parmigianino,
siendo muy radical, en ese caso aún, uniendo una imagen con muchas figuras hay
un gran orden, muestra orden, y eso solo podía hacer el Greco, que eran poner
muchos personajes y en ese caos llegar al orden.
Otras
de las cosas importantes del Greco era que pintaba personajes del s-XVI y XVII
con escenas que se desarrollaban en la época romana y eso lo conoció en Italia
porque eso lo hacían Massaccio, los grandes pintores italianos del cuatroccento
y cinqueccento, copiándolo en España.
La
sensación de las pinceladas del Greco, son de pinceladas muy rápidas de una
imagen como bocetos en algunas ocasiones y eso también marca su diferencia, las
posiciones forzadas, la anulación espacial.
Hay
una excepción en el concepto de pintores en el barroco que hacían pinturas
religiosas muy convencionales, muy sencillas, de genero bodegones, siendo el
Greco una figura excepcional en ese panorama, pues el seguiría pintando del
s-XVII.
LA
ASUNCIÓN – El Greco (1570/1575) Museo del Prado
Queda
claro que la representación y la importancia de aprendizaje que tuvo en Italia
se representa en esta obra en el que usaría ese tema tan manido, tan
representado por todos los artistas italianos, como Leonardo, Fra Angélico, Los
Carracci, etc. todos los grandes pintores hicieron ese tema, la Anunciación que
fue un tema muy repetido por los artistas por la contrarreforma que lo pedían.
Sin
embargo, ya la representación era especial porque aparece ese rompimiento de
gloria que solo sabía darlo el Greco, se esa noción de rompimiento entre la
tierra y ese mundo celestial que en
ocasiones lo hace ordenado y en otras más desordenado como difuminando las
formas.
Orden
y caos, pero no un caos en el cielo sino en la tierra, como ya lo hacía Miguel
Ángel en el Juicio Final, y Rafael en las pinturas del Vaticano en las que el
Santísimo Sacramento representaba la zona celestial mucho más calmada y en la
tierra diferentes personajes que debatían entre ellos entorno al Santísimo
Sacramento y mucho más desordenado.
El
Greco tomaría eso como elemento para crear sus pinturas, pero con una visión
mucho más distinta, creando los famosos rompimientos de gloria que distingue la
parte terrenal de la parte celestial.
En
la Anunciación estaba diciendo que María también es humana al igual que lo
sería su hijo, otra cosa es que formen parte de ese Universo Divino en el que
nos lo hace saber en esa escena en la que pinta un rompimiento con la
representación de los ángeles, siendo una noción muy barroca para 1570/72 que
podrían hacer pintores posteriormente como Careño de Miranda, Herrera Barnuevo
que eran pintores de la época de Carlos II, que eran totalmente barrocos o
Francisco Ricci que creaban a través del movimiento grandes rompimiento de
gloria.
ROMPIMIENTOS
DE GLORIA DEL GRECO: Adoración del nombre de Jesús
El
Greco no solo era novedoso en el concepto espacial o de las formas, sino
también en el dinamismo de las pinturas marcando un antes y un después, así
como marcaría también el camino hacia el barroco, pero después de su muerte no
tuvo mucho más éxito.
EL
ENTIERRO DEL CONDE DE ORGAZ – El Greco (1586/1588) Iglesia Santo Tomé
El
Greco hizo muchísimas obras en Toledo en el Museo Casa del Greco, hay bocetos,
lienzos, siendo una gran representación de su obra.
El
entierro del conde de Orgaz era una obra bastante importante, marcando un antes
y un después en el concepto de la pintura que es muy italiano, como se puede
observar en ese suceso que tuvo lugar en el s-XIV, pero en el que estaban
representadas personas del s-XVI y que estaban marcadas.
Todas
esas personas estaban dialogando con distintas actitudes recuerdan al Santísimo
Sacramento de Rafael en el Museo del Vaticano, siendo un rompimiento de gloria
totalmente distinto, pero el concepto de la composición era básicamente lo
mismo.
Se
puede observar en la pintura el cuello de lechuguilla del barroco, la Orden de
Santiago, el famoso traje negro que se conocía como traje al a española de un
negro riguroso.
Los
trajes eran de un color negro azulado y que gustaban mucho a todos los
extranjeros que decían que la elegancia era vestir a la española, con los
cuellos de lechuguilla con grandes bordados que se podían decorar con distintos
colores, pudiendo ser azules, rosas, rojos, verdes, etc. porque tintaban esa
tela para que las fiestas fueran de alegres colores.
AUTORRETRATO
DE EL GRECO
Esta
representación se supone que es su autorretrato, pero en este sentido muchas
veces los autorretratos metidos dentro de los grandes frescos, son hipótesis,
se cree que es él.
PERSONAS
REPRESENTADAS EN LA PINTURA
En
esta pintura se representa a Gonzalo Ruiz muerto y la mayoría del colores de
los rostros del Greco solían ser muy pálidos por representar básicamente a la
muerte, y los personajes que pintaba estaban entre la vida y la muerte, por ser
personajes divinos o claramente personas fallecidas.
En
este case se puede observar que es un suceso que ocurrió en el s-XIV, pero se
pintó en el s-XVI por lo que se pudo desvirtuar toda esa escena.
Lo
más importante es que el señor de la villa de Orgaz iba a subir al cielo, que
era lo que se pretendía en la contrarreforma que no dejaba de ser un concepto
muy parecido al del románico, pero de una manera dulcificada y más
estilísticas, pues el románico el mensaje que daba es que si no hacían caso al
Cristo en Majestad las consecuencias las verían más adelante.
Por lo que había que seguir una serie de normas
y disposiciones dadas en el Concilio de Trento y si se hacía eso pues se
disfrutaría del cielo y no se iría a sufrir al infierno, y así poder formar
parte dela corte celestial, y esta teoría era bonita por lo que todo el mundo
lo iba a hacer, y en ese sentido es lo dice ese mensaje.
Ese mensaje las personas de Toledo no lo
comprendían muy bien, pues era un mensaje para la élite y los historiadores del
arte sacan estas conclusiones, pues los artistas no hablan de ello.
San Agustín y San Esteban participan en ese
momento yendo a enterrar al Conde de Orgaz, como cuenta la leyenda del s-XIV de
que estos dos santos estuvieron en el entierro, por lo tanto el Greco basaría
su pintura en una leyenda, una historia oral que se había transmitido década
tras década y siglo tras siglo.
El niño que aparece en la pintura a la
izquierda era el hijo del Greco que sería arquitecto y una persona importante
en Toledo que haría su Ayuntamiento, en la obra estaba señalando al conde, él
con el dedo está diciendo que no se distraiga la atención que hay que prestar
atención primero a esa escena, y al mirar al niño se ve al conde y la mirada va
hacia arriba indicando que asciende al cielo donde se ve la corte celestial
donde hay un ángel barroco más que renacentista y manierista al ser un ángel
inestable y que muestra movimiento, pero no es un movimiento caótico, por lo
tanto es mucho más barroco que manierista.
Están representados, Moisés, David, San Pedro,
Felipe II que siempre está en la corte celestial representado por el Greco.
Tiziano, pues era un hombre que estaba todo el día en misa, rezando, y su mente
pensaba continuamente en el concilio de Trento y algunas cosas las pasaba y
otras no, pero era una persona que consideraba que el se merecía el cielo, el
Papa Sixto V que llevó a cabo las reformas de la ciudad de Roma con Domenico
Fontana como en la Piazza del Popolo.
Los personajes que están entre interrogaciones
es porque los historiadores del arte no han podido ver la iconografía al cien
por cien porque en algunas ocasiones ni se las muestran.
A la corte celestial accedía la élite, por lo
que los nobles veían en ese tipo de pintura y representaciones un amanera de
situarse ellos en el cielo, y por eso en muchas ocasiones se encuentran nobles
representados en la corte celestial como diciendo que era una buena persona, mostrando
ese concepto de propaganda típica del s-XVI y XVII.
El Greco murió en 1614 quince años después de
entrado el s-XVII durante el reinado de
Felipe III que acababa hacía unos años de devolver la corte a Madrid porque
desde 1600 a 1606 la corte estaba en desde Valladolid, y por lo tanto el Greco
estaba más alejado de la corte si cabe, porque estaba en Toledo.
El Greco murió en la España del Barroco en 1614 y se supone
que el Barroco empezó en 1600 terminando en 1750, fronteras flexibles.